En Colombia, la preocupación por la escasez de agua ha aumentado significativamente en los últimos años, debido a factores como el fenómeno de El Niño, la sobrepoblación y el uso insostenible de los recursos hídricos, lo que ha generado que muchos colombianos implementen acciones para fomentar el ahorro de este líquido dentro de sus hogares.

Una de ellas ha estado orientada a la adquisición de nuevos electrodomésticos que eviten el desperdicio de agua. Tal es el caso del lavavajillas, que, aunque no se encuentre entre los más comunes de las familias, hoy empieza a popularizarse entre la gente, especialmente en los públicos más jóvenes, debido a su alto componente de sostenibilidad.

De hecho, según cifras de la firma Mordor Intelligence, se estima que, para el 2029, el mercado global de lavavajillas alcanzará una valorización cercana a los 40,73 mil millones de dólares y crecerá a una tasa compuesta anual del 2,5 % en los próximos cuatro años.

“El lavavajillas es un electrodoméstico que, sin duda, cada día gana terreno entre los colombianos, no solo por la facilidad de ahorro que ofrece en términos de tiempo para las personas, sino también en materia de consumo de agua”, expresa Eduardo Triana, gerente de producto de Electrolux para la Región Andina. Asimismo, el directivo agrega, “utilizar esta tecnología reduce hasta en un 92 % el uso de agua, en comparación con un proceso de lavado manual”.

Pero, además de esto, ¿qué otros secretos bien guardados tiene el lavavajillas? Triana expone:

  • No gasta mucha energía: Estos electrodomésticos están diseñados para ser energéticamente eficientes, lo que significa que no utilizan mucha electricidad para operar.
  • Versatilidad: Además de loza, en el lavavajillas se pueden lavar desde juguetes plásticos hasta frutas y verduras. Lo anterior, gracias a sus avanzados sistemas de limpieza.
  • Mejor limpieza: Los lavavajillas alcanzan temperaturas más altas que las que se pueden lograr al lavar a mano, lo que asegura una limpieza más profunda, así como eliminar bacterias y gérmenes de manera más fácil.
  • Organización: Utilizar un lavavajillas ayuda a mantener la cocina más ordenada, ya que se evita que los platos sucios se acumulen en el fregadero. Además, se puede cargar el lavavajillas de manera ordenada, maximizando el espacio.
  • No requiere tanto jabón: Debido a su tecnología, el lavavajillas evita el desperdicio de jabón. Para su uso, este aparato demanda una cantidad reducida de este producto, la cual varía según el tamaño de la carga.

Según datos de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, cerca del 23 % del agua que se consume en los hogares corresponde a acciones en la cocina.